Espero sepan disculparme
Son tantas las veces en que nos emocionamos con historias ajenas, que cuesta retomar el sentido a la vida en el lugar en que lo habíamos dejado. A veces nos da por perseguir a las emociones de las historias que no nos pertenecen, buscando reflejos a realidades que no se contemplan, es por eso que espero sepan disculparme si he faltado a algunas citas, nunca fui muy puntual, nunca me gustó que nadie espere nada, es y ha sido siempre mi refugio para no decepcionar así como la constatación de que es poco menos que lo único que hago.
Tengo grandes complejos, algunos tan poco exclusivos que lamento mis carencias en los que a la originalidad se refiere. Me siento la oveja negra y no soy mas que uno más en un rebaño de bóvidos en escala de grises. Y es que el gris es un gran color defenestrado por la sociedad. Mierda de sociedad por otro lado, pero hoy no quiero hablar de nuestros lamentables logros sociales, ni tampoco quiero hablar de mi, pero supongo que no puedo evitarlo. Hay algo en común entre esos dos aspectos, una complejidad estúpida que no responde a la lógica.
No obstante, les decía, espero sepan perdonarme que me dirija a ustedes así, tratándoles de usted, pero siempre me hizo gracia. Espero no les importe que no crea en el concepto “diario”. Me gustaría que pudiesen entender que la percepción del tiempo y el espacio que tengo es absurdo. Que no entiendo porque dejé de ser un niño, si nunca me lo propuse, me gustaría ser un niño repelente que tratase de usted a sus semejantes y a los que no lo son tanto. Espero sepan disculparme por hacer uso de la mirada periférica, a veces creo que es un don, otras veces no creo en nada, sepan disculparme esto también. Me han educado para creer y cuando me asaltan las dudas a este respecto, me siento en el vacío. Vamos a hablar del vacío, ¿Qué hay de malo en el vacío? Yo no lo se, supongo que algunos creen que lo malo del vacío es caer, caer al vacío... pero solo es malo si no llevas paracaídas, dirán otros...los más osados aducen que lo malo es que el vacío tenga límites, si el vacío no tiene límites, es decir, si no hay, por ejemplo, un suelo ¿cuál es el problema? Y así podríamos seguir divagando sobre la ley de la gravedad, la gravedad del vacío, atmósferas o sobre la capacidad de salirse del vacío de la misma manera que se cae en el.
Conclusión: Todo es relativo mientras no haya golpes o todo golpe es relativo mientras no sea percibido o toda percepción es relativa mientras podamos sentirla. Bastante me ha costado llegar hasta aquí, como para que además esperen que acabe esto de una manera coherente...
Bienvenidos a una nueva temporada de confusión, bienvenidos a los minutos de la basura, los buenos han hecho su trabajo, pero no todos obtuvieron resultados.
El tío Bob. 2007.